Málaga

CATEDRAL BASÍLICA DE LA ENCARNACIÓN

La Santa Iglesia Catedral Basílica de la Encarnación es la catedral de Málaga, España. Se trata de un grandioso templo, una de las joyas renacentistas más valiosas de Andalucía. Se encuentra dentro de los límites que marcaba la desaparecida muralla árabe sobre el solar de la primitiva mezquita aljama, el lugar donde los Reyes Católicos Isabel y Fernando ordenaron erigir un templo cristiano a los pocos días de conquistar la ciudad en 1487.

Fue construida entre 1528 y 1782. Las originarias trazas, de estilo Gótico, derivaron en un proyecto renacentista en cuyos planos participaron Diego de Siloé y Andrés de Vandelvira. La catedral es una síntesis de estilos arquitectónicos entre los que prevalece el Renacimiento sobre el primer Gótico de la antigua fábrica y los elementos barrocos añadidos desde principios del siglo XVIII.

 

Este es el altar mayor de la Catedral de Málaga 

 

La Iglesia Catedral de la Encarnación de Málaga se comienza a construir en el año 1528 sobre el solar de la antigua mezquita aljama en el momento de su reconquista por los Reyes Católicos, en el año 1487.

Parece ser que el afamado arquitecto Enrique Egas , venido desde Toledo en compañía del maestro cantero Pedro López ya emite un primer informe en el año 1528 sobre sus trazas, tres años después de que el cabildo decidiera erigir un nuevo templo, siendo el mismo Pedro López, el encargado de dirigir las obras de la cabecera, diseñada por uno los grandes maestros de la época, Diego de Siloé.

Después de un período de inactividad, el cabildo hace venir en 1549 a Andrés de Valdelvira, pasando el encargo al año siguiente a manos de Hernán Ruiz II, grandes exponentes ambos de la arquitectura renacentista en Andalucía, y luego a Diego de Vergara, maestro formado en Italia, y a su hijo de igual nombre; quienes trabajan en esta catedral hasta casi el final del siglo XVI. Así, por estas fechas ya estaban en pie la cabecera y la sacristía, y puede decirse que hasta entonces habían intervenido en el magno proyecto en mayor o menor grado todos los grandes maestros del Renacimiento andaluz.

La Catedral fue consagrada el 3 de agosto de 1588

 

 

 

ALCAZABA

La Alcazaba de Málaga es una fortificación palaciega de la época musulmana, construida sobre una anterior fortificación de origen fenicio-púnico. Se encuentra en las faldas del monte Gibralfaro en cuya cumbre se halla el castillo del mismo nombre. Alcazaba y castillo están unidos por un pasillo de monte resguardado por dos murallas zigzagueantes o rampantes llamado La Coracha.

Ocupaba el extremo oriental del desaparecido recinto amurallado de la ciudad, como todas las alcazabas musulmanas, de manera que los frentes de mediodía, poniente y norte quedaban a intramuros.

La Alcazaba se encuentra asimismo junto al teatro romano de Málaga, el parque de la ciudad y frente al puerto, en un enclave singular

La Alcazaba, en Malaga, es una especie de fortaleza en la que se refugiaban los antiguos gobernantes musulmanes de los siglos VIII y XI, ubicada en la falda del Gibralfaro, lo que hace que sus murallas puedan ser vistas de todas partes. la función de su construcción fue la de protección siendo una espectacular obra militar, por muchos es nombrada como la de mayor importancia de toda la península Ibérica.

Toda la construcción completamente de piedra, es una magnifica con una estructura concentrica, lo que hacia que para llegar al primer mandatario se tuviera que pasar por una gran cantidad de puertas, lo que la hacían un lugar muy seguro para la época de guerras, en las que eran perseguidos y atacados de manera constante, quien ordeno su construcción fue el rey de Granada, Badis ben Habus.

La Alcazaba es una edificación del siglo XI construida sobre la roca y en la que destaca la armoniosa conjunción de las necesidades defensivas y la serena belleza de sus estancias y jardines interiores; como obra militar, es la más importante musulmana conservada en España.

 

Para llegar a la parte más elevada, donde habitaban el alcalde o cadí de la ciudad, era necesario atravesar desde el interior de la ciudad tres recintos concéntricos amurallados y alargados, y ocho puertas fortificadas; dos de ellas en recodo, que daban seguridad a sus habitantes, tanto a los reyes y gobernadores musulmanes, que habitaron el palacio nazarita, como a los que moraron en el arrabal a intramuros. La presencia de torres albarranas con saeteras y murallas almenadas también aportan importantes elementos defensivos. Desde los balcones del palacio se puede observar una panorámica excepcional de la bahía.

Las torres y los muros han sido reconstruidos, antes y después del paso de la ciudad a manos cristianas. En su construcción se emplearon materiales de acarreo y se reutilizaron piezas del anexo teatro romano, como columnas y capiteles.

Las construcciones del siglo XI se realizaron de piedra caliza numulítica, de canteras próximas al mar, alternando sillares de canto con otros de frente. Pero esta piedra se descompone muy rápidamente con la humedad, por lo que se tuvieron que efectuar pronto reparaciones. A finales del siglo XIII o primeros del XIV, se reforzaron los muros y torres, adosándoles muros de mampostería al exterior